Este miércoles los médicos no atenderán las citas programadas, pero sí habrá atención de guardias en los sanatorios privados.
Los médicos de La Plata que se desempeñan en el sector privado realizan un paro este miércoles en la ciudad de La Plata, con variedad de reclamos en su haber
Se trata de las y los profesionales que están nucleados en la Agremiación Médica Platense (AMP), entidad que hace algunos días se declaró el «estado de alerta gremial,» mencionando que «el sistema está llegando a un punto en el que no se puede sostener la atención médica».
Según argumentaron, las problemáticas que los afectan tienen que ver con «el desfasaje entre el ritmo inflacionario y la actualización de honorarios», además de «la presión impositiva a la que se ven expuestos los médicos y médicas». A ello agregaron los «débitos injustificados por parte de obras sociales y prepagas y el atraso en el pago por parte de muchas obras sociales».
En ese sentido, el presidente de la entidad gremial, doctor Cesarini manifestó que “la medida no es más que lo surgido luego de un derrotero de meses en los que se plantearon sistemáticamente las problemáticas con el fin de poder abordarlos entre todos y darle solución, cosa que no sucedió».
En esa línea, el profesional aseguró que «hoy la situación nos pone en una realidad en la que trabajar se torna imposible”.
Asimismo, el secretario de la Agremiación, el doctor Gastón Quintans declaró que “como se estableció en el plenario llevado a cabo la semana anterior, la medida es por 24 horas y se basa en suspender toda prestación programada, exceptuando de la misma a la atención por guardia, como se hizo siempre que se tomó una medida”.
“el paro no es contra una única obra social o prepaga, es una forma de hacernos ver y alertar sobre el estado de la salud privada y la necesidad de ser escuchados con el fin de encontrar alguna medida que permita sostener la atención de nuestros pacientes”
En comunicados anteriores desde la Agremiación sostuvieron que la falta de actualización de honorarios sumado al atraso en los pagos, que alcanzan a veces los 60-90 días hacen que se licuen los ingresos.
De igual forma advirtieron que no sólo es un problema de honorarios, ya que «el valor que se percibe en conceptos de gastos (los cuales en su mayoría son en dólares) hacen imposible la realización de estudios y prácticas».