vuelve a las mateadas en las plazas. Este viernes retoma ese estilo «amigable» de acto político en La Plata, un esquema más cercano al Frente Amplio uruguayo que al peronismo.
En medio de la tensión con Cristina y Máximo, el gobernador bonaerense elige mostrarse cerca de la gente
El flayer que el ministro Carlos Bianco compartió en las redes evita toda especulación con candidaturas. No hay una frase, un concepto que motive la convocatoria. «Traé tu mate y reposera. Mateada con vecinos de La Plata y la Región Capital», dice la imagen.
Las mateadas son un sello de Kicillof. Fue el esquema que le permitió dar los primeros pasos como candidato a gobernador en 2019. Es un formato muy distinto del modelo de acto peronista: un escenario chico, reposeras y termos Stanley en las primeras filas. Un perfil de militancia más cercano al progresismo que al peronismo.
En la plaza Islas Malvinas de la capital provincial el gobernador lanzó -en diciembre de 2022- su candidatura a la reelección. «El año que viene le vamos a pedir a los bonaerenses que nos acompañen», dijo en un acto donde la tensión entre La Cámpora y los organizadores de Kicillof casi termina mal.
Por entonces, el peronismo no había definido ninguna candidatura y ese acto puede considerarse como uno de los tantos motivos que hoy explican la pelea entre Kicillof y Máximo Kirchner.
En las últimas semanas la tensión entre Kicillof y Cristina Kirchner parece haber recrudecido. La cumbre del peronismo en Moreno estuvo lejos de servir para comenzar a acercar posiciones
Cristina le marcó la cancha al gobernador y dijo que es una mala idea desdoblar la elección del año próximo. Kicillof mantiene silencio sobre el tema y deja pasar los días antes de tomar una decisión.
Se sabe que la postura del gobernador era más cercana al desdoblamiento para poder poner en la balanza su gestión en la provincia. La ex presidenta difiere y enciende algunas luces amarillas, en particular en temas como Salud y Seguridad.
«Tenés que despojarte de tu ego» le dijo Cristina a Axel durante su discurso en Moreno. Dos días más tarde, el gobernador pegó el faltazo a su asunción como presidenta del PJ nacional. Kicillof había organizado para ese día agenda en el interior de la provincia.
Más tarde, en su discurso de asunción en el PJ, Cristina apuntó contra algunos dirigentes, a quienes acusó de haberse convertido en «militante electoral».
La ex presidenta destacó la necesidad de que los líderes del partido retomen su rol de «militantes políticos», señalando que la política no debe reducirse solo a las contiendas electorales. «Tiene que haber por parte de los dirigentes políticos de nuestro partido, que muchas veces los veo convertidos en militantes electorales, volver a ser militantes políticos», subrayó, insistiendo en la importancia de una interpretación correcta del momento político.