El funcionario dejará su cargo como Secretario de Estrategia y Asuntos Militares el 22 de diciembre. Adujo «motivos personales» y aseguran que su salida no está vinculada a los recientes casos de corrupción en las Fuerzas Armadas.
Es el número dos de Petri y uno de los referentes negacionistas del Gobierno
La batalla por la «memoria completa» pierde un guerrero. Uno de los hombres fuertes del negacionismo del Gobierno de Javier Milei dejará el cargo como número dos del Ministerio de Defensa. Claudio Pasqualini, quien había asumido en enero, lleva varios meses buscando una salida de la cartera que conduce el radical Luis Petri. Cerca del ministro informan que todavía no fue presentada formalmente, aunque reconocen que su partida se hará efectiva el 22 de diciembre, cuando darán a conocer el nombre de su reemplazante. Si bien se produce en un contexto de fuerte crisis por los escándalos de corrupción de las últimas semanas, aseguran que no está relacionada con eso sino con problemas personales. «La gestión requiere mucho tiempo y necesita dedicarse más a su familia», sostienen cerca de Petri luego de elogiar su tarea.
Pasqualini se desempeña desde enero de este año como Secretario de Estrategia y Asuntos Militares (SEAM)
En la práctica oficia de viceministro, cargo que no existe formalmente en organigrama. Teniente general retirado, había sido nombrado jefe del Ejército en 2018, durante la presidencia de Mauricio Macri y la gestión de otro radical como ministro: Oscar Aguad.
De carrera militar, egresó del arma de Infantería en 1982. Integró la “promoción Malvinas” como se conoce a quienes culminaron su formación el año de la guerra con el Reino Unido. No combatió ni tuvo actuación durante la última dictadura. Durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner obtuvo su ascenso a general de brigada. Fue también el agregado militar en México durante la administración kirchnerista.
Cuenta con un título de licenciado en Estrategia y Organización, analista de sistemas y con una diplomatura en Defensa Nacional. Su suegro, Athos Renés, fue condenado a prisión perpetua por la masacre de Margarita Belén, cuando un grupo de presos políticos fue fusilado. Falleció en la cárcel en octubre último. La esposa de Pasqualini solía compartir en redes sociales mensajes que retrataban a los represores como presos políticos.