El Presidente analizó en la reunión de Gabinete nacional del martes los contratiempos que puede sufrir la ley ómnibus ( de “Bases”, como la llama el Gobierno) este miércoles en la Cámara de Diputados, en el debate que se iniciará a las 10 de la mañana, pero no tanto por el “poroteo”, es decir si están los votos para aprobarla, sino porque intuyen que el kirchnerismo intentará “ensuciar” la sesión.
En el Gobierno temen “ardides” del kirchnerismo para ensuciar la sesión para debatir la ley ómnibus
“Lo que no logra, lo intentan por otra vía. Vayan al archivo. Intentan parar la sesión gritando, insultando y hasta tirando piedras”, dijo a parlamentario.com una calificada fuente de la Casa Rosada, en obvia referencia particularmente a la sesión de diciembre de 2017 en la Cámara baja cuando gobernaba Mauricio Macri y hubo una protesta violenta en la que se arrojaron “18 toneladas de piedras”, según palabras de la ahora mano derecha de Milei, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
La sesión debatía la movilidad jubilatoria y fue rechazada por el kirchnerismo, resultando un hito en la caída de ponderación sobre la gestión de Macri. Pero las deliberaciones del martes en el Gabinete tuvieron otros condimentos. “¡Que vayan y que voten y que se termine!”, disparó el presidente Milei, enfadado por las marchas atrás que sufrió su paquete de leyes ómnibus enviadas a la Cámara de Diputados a fines de diciembre, en sesiones extraordinarias hasta el 15 de febrero.
El lunes a la noche, en la reunión de gobernadores y legisladores opositores pero afines al Gobierno -“dialoguistas”, los llaman- buscaron alternativas frente al ministro del Interior, Guillermo Francos, para emprolijar el paquete de leyes, especialmente bajar la carga contra las provincias.
Un punto central es la decisión de Milei de retirar todos los proyectos de ley en materia recaudatoria -el viernes pasado lo anunció el ministro de Economía, Luis Caputo-, perjudica más a los gobernadores que al gobierno central
Por eso plantearon la idea de ampliar el período de vigencia del Impuesto País -vence a fines de año- y extenderlo varios años, pero Milei le bajó el pulgar a esa iniciativa “dialoguista” porque planea “antes de mediodía de año liberar el cepo cambiario” y, por lo tanto, ese impuesto no tendrá sentido.
Lo curioso es que los gobernadores dijeron que ese tema se debatió en el CFI y el Gobierno dijo que no. El gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, incluso trató de “empleado” al vocero presidencial Manuel Adorni, quien había rechazado de plano que se hubiese hablado de ese punto, con lo que significó.
“No estuvo, si hubiera estado sabría que fue un tema central de la reunión. No colabora en nada con una frase desafortunada. Adorni es un empleado”, subrayó el mandatario cordobés, cercano en este debate a sus pares de Juntos por el Cambio.
Milei se juega a todo o nada en la sesión de este miércoles y jueves, sin saber a ciencia cierta por estas horas previas si logrará imponerse en la votación, que se espera para jueves a la noche
“El Gobierno va mañana a la sesión y se vota”, dijo la fuente a parlamentario.com, pero ante la pregunta si estaban los votos, solo atinó a una mirada expresando una clara incógnita.