El ministro de Seguridad bonaerense desestimó los cuestionamientos hacia su crecimiento patrimonial. También habló de su vínculo con Kicillof.
«No es la primera vez que lo hacen porque durante el gobierno anterior ya lo habían hecho»
Un informe periodístico de Jorge Lanata lo volvió a poner en el ojo de la tormenta tras unas semanas de relativa calma. Esta vez las críticas hacia el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, era apuntado por su patrimonio y supuestas irregularidades en las declaraciones juradas presentadas ante los organismos de control. Fiel a su estilo, Berni respondió mostrándose en el territorio y trabajando.
El encargado de la seguridad bonaerense estuvo ayer entregando móviles policiales nuevos en Azul y después en 9 de Julio, ambos distritos gobernados por intendentes de Juntos por el Cambio. En las dos ciudades rechazó las denuncias en su contra por enriquecimiento ilícito y también los rumores sobre su salida del gobierno de Axel Kicillof. «No es la primera vez que lo hacen porque durante el gobierno anterior ya lo habían hecho. En esa oportunidad me denunciaron y mi patrimonio fue monitoreado y peritado por el cuerpo de peritos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. En el 2015 los peritos me sobreseyeron y estoy convencido que esta no va a ser la excepción», expresó ante la prensa local.
Según Berni, la acusación responde a un «adelantamiento del año electoral» y constituye una «operación» mediática en su contra.
Según Berni, la acusación responde a un «adelantamiento del año electoral» y constituye una «operación» mediática en su contra. En estos mismos términos habló sobre su relación con el gobernador de la Provincia y los rumores de su renuncia. «Estuve trabajando hasta anoche con el gobernador», aseguró en referencia a la noche del martes y al inminente lanzamiento del Operativo Sol. Finalmente, Berni le dejó un reclamo a los intendentes: «Donde hay actores que no están presentes es importante que asuman el compromiso», declaró.