Admitió que estar al frente del Poder Ejecutivo se trata de una tarea que «desgasta» y realizó un balance sobre su gestión que finalizará el próximo 10 de diciembre cuando entregue los atributos presidenciales a quien se imponga en las elecciones
Realizó un análisis de su gestión al frente del Poder Ejecutivo y admitió que «la presidencia desgasta»
«No sé si estoy más viejo, pero han sido cuatro años complejos, no han sido comunes ni para mí ni para la humanidad», y agregó: «Tampoco para la Argentina, pero acá andamos, todavía seguimos firmes”, dijo.
Alberto Fernández abordó las dificultades de su mandato: «Nos queda un sabor agrio en la boca, pero la verdad que uno puede tener esa lectura pesimista y derrotista o puede tener en cuenta qué pasó. Cuando uno revisa, se da cuenta que la cosa no estuvo todo lo mal que algunos dicen», explicó.
El entrevistador le remarcó al Presidente que lo notaba «más flaco», a lo respondió: «La dieta la hice porque estaba muy gordo». Y agregó que dejó de consumir harinas y dulces: «Era lo que más daño me hacía», añadió.
«Hago poco ejercicio porque no tengo tiempo suficiente, pero sí camino unos cuántos kilómetros tres veces por semana», detalló y agregó: «No había razón para haber engordado tanto», lanzó,
«Por lo pronto, tuvimos que hacernos cargo de una deuda privada, acreedores privados, increíble, que pudimos superarla. Ordenarla. Y tuvimos que enfrentar la peor de las deudas que es con el FMI, que hace un daño incalculable para un país porque marca límites y condiciones que en situaciones adversas hacen todo más dificil», explicó. «Pero fue un panorama internacional que se ha dado, que nos ha generado un gran problema», se quejó.
«En los trabajos registrados, en los últimos 2 años, los salarios terminaron ganándole a la inflación. Lo que pasa es que vienen de caer 20 puntos con Macri, entonces ganar 2 puntos arriba de una inflación tan importante, obviamente no alcanza. Es una tarea pendiente que nos queda», dijo Fernández.
Y agregó: «Lo que creo es que cuando revisás, tenes una Argentina en donde muchas cosas cambiaron, donde la salud pública volvió a ser prioridad, la salud pública volvió a ser prioridad», reiteró.Y le disparó a la oposición. «Tenemos enfrente contrincantes que le han dicho a la Argentina ‘entreguemos las Malvinas a cambio de vacunas’, por ejemplo. Que han dicho que las Malvinas ‘lo único que van a hacer es aumentar el gasto público’. Dicen que hay que terminar con las indemnizaciones por despido. Que hay que terminar con el aguinaldo. Gente que cree que el Estado no está para hacer casas ni obra pública. Hay dos modelos de país muy distintos», advirtió.
«Tenemos enfrente contrincantes que le han dicho a la Argentina ‘entreguemos las Malvinas a cambio de vacunas'»
«Este presidente se sentó con Boris Johnson, quien le dijo que tenía mucha plata para invertir en energía para el desarrollo de Argentina, le dije ‘pero antes de hablar de nada tenemos que hablar de Malvinas y se terminó la reunión'», reveló.