Este lunes será un día clave para el gobierno de Javier Milei. Tras el anuncio del nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el levantamiento del cepo, será el primer día hábil para los mercados y el inicio de un nuevo capítulo de la gestión «libertaria».
La visita de Bessent llega en medio de la sangría de reservas, el acuerdo con el FMI y la salida del cepo. La guerra comercial con China y los recursos argentinos, los objetivos de Trump
Con el comienzo del nuevo régimen cambiario, que genera gran incertidumbre por sus implicancias, también llegará al país el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, en un claro respaldo del presidente Donald Trump a la gestión de Milei. En medio de la convulsión global por los aranceles que impuso la Casa Blanca a raíz de la guerra comercial con China, y con la mira puesta en los recursos naturales estratégicos que tiene la Argentina (entre otras cuestiones que no están del todo claras), Bessent llegará por la mañana a Buenos Aires y se reunirá con Milei en la Casa Rosada a las 15.
El viernes pasado el ministro Luis Caputo anunció en conferencia de prensa un nuevo acuerdo de deuda con el FMI por 20 mil millones de dólares y, además, anticipó que desde este lunes se llevará a cabo la salida de los controles cambiarios y se pasará a un esquema de flotación del tipo de cambio entre 1000 y 1400 pesos. También que se eliminará el dólar blend. El primer impacto de todas esas medidas es incierto y se conocerá este lunes con la apertura de los mercados. Sin embargo, aunque aún no se sabe cuál será el valor del dólar, durante el fin de semana después del anuncio ya hubo remarcación de precios en distintos sectores de la economía, que oscilaron entre el 20 y 30 por ciento en determinados productos (ver aparte).
Por otra parte, en los detalles que se conocieron del Staff Report del nuevo acuerdo con el Fondo, el organismo reconoció que tiene «altos riesgos financieros» con el caso de la Argentina por la cantidad de dinero que le lleva prestado, también elogiaron la «desregulación» que está llevando a cabo el ministro Federico Sturzenegger (con el fin de destruir el Estado), hablaron de la necesidad de una reforma previsional para el año que viene, de «contener» los salarios, de la reducción de subsidios –y del fin de la segmentación de las tarifas– y mencionaron que hay que incrementar las exportaciones de energía y minería, además de privatizar las empresas estatales. Es decir, que hay que fomentar una primarización de la economía de modelo extractivista con salarios a la baja y sin derechos sociales para las grandes mayorías.
Sobre la posible disparada del dólar después de los anuncios que hizo el ministro de Economía, desde el oficialismo consideran que «lo que pase el lunes es anecdótico», y subrayan que «hay que esperar que el dólar encuentre su valor en diez o quince días». Tal como dijo Milei durante la cadena nacional que hizo cerca de la madrugada, y también Caputo unas horas antes, desde la Casa Rosada sostienen que «la inflación no les preocupa», que «va a desaparecer», y que por la apertura del cepo habrá «un boom de inversiones», que permitirán el ingreso de más dólares.
«lo que pase el lunes es anecdótico», y subrayan que «hay que esperar que el dólar encuentre su valor en diez o quince días»
El número de inflación que se conoció el viernes pasado, sin embargo, fue el más alto en los últimos seis meses y alcanzó el 3,7 por ciento. Si bien aún no se sabe qué pasará en las próximas semanas con la nueva «flotación libre entre bandas» se especula que el valor del dólar llegará al tope de 1400 y que esa devaluación, tal como ocurrió históricamente, repercutirá en precios. «También suponían que con Milei el dólar se iba a 3000 o 4000 y eso no ocurrió», responden en el oficialismo y confían que «quizás en un mes el precio del dólar esté más cerca de mil que de 1400».
El ministro de Desregulación Federico Sturzenegger, el domingo por la tarde se atajó y escribió en sus redes: «hace años los argentinos vieron que el dólar y los precios se movieron juntos. Pero esto no quiere decir que el tipo de cambio sea responsable de la inflación». En el texto, que luego fue retwitteado por el ministro de Economía, Sturzenegger adelantó que este lunes «la Argentina inaugura algo inédito: un sistema monetario con la situación monetaria totalmente controlada y superávit fiscal que da credibilidad a ese control. En ese contexto va a quedar rápidamente evidente que los movimientos del dólar y del precio de la papa, al no tener correlato en cambios en la cantidad de dinero, no tienen efecto en el nivel general de precios». Luego, concluyó: «Obviamente los argentinos tienen motivos para dudar, desconfiar, no creer; los políticos los saquearon por décadas. Pero eventualmente va a ir quedando más claro, como ocurrió hace 35 años en Nueva Zelandia, Chile o Israel (allí también llevó un tiempo hasta que se entendió)».