El Fondo Monetario Internacional (FMI) considera reducir los sobrecargos que aplica sobre sus créditos a los países deudores, beneficiando a la Argentina y representando un alivio para el entrante gobierno de Javier Milei.
La decisión sería a cambio de un aumento del 50% sobre las cuotas de los países miembros
La decisión fue anticipada en el último encuentro del Comité Monetario y Financiero Internacional del organismo (IMFC), que reúne a representantes de los países miembros, en el que se le dio el visto bueno a la propuesta esbozada por el directorio ejecutivo del Fondo de aumentar las cuotas de los países miembro en un 50% en base a sus pagos actuales.
En este sentido, desde el organismo que conduce Kristalina Georgieva explicaron que «el aumento de las cuotas mejoraría los recursos permanentes del FMI y fortalecería la naturaleza basada en cuotas del Fondo al reducir la dependencia del endeudamiento y garantizar así el papel principal de las cuotas en los recursos del Fondo».
La presidenta del IMFC y ministra de Economía de España, Nadia Calviño señaló que “tras la revisión general de cuotas, se llama al Fondo a revisar los límites de acceso a los recursos generales”, indicando que “consideraremos una revisión de la política de sobrecargos». El FMI debe completar su última revisión de cuotas antes del 15 de diciembre.
De esta manera, el organismo se encamina a dar lugar a la reducción de la tasa que pesa sobre el crédito otorgado durante el gobierno de Mauricio Macri, debido a que el monto prestado en su momento excedió lo que habilita la cuota del país.
El avance en la reducción de los sobrecargos, que ha sido un recurrente reclamo del gobierno de Alberto Fernández, no sería de la magnitud esperada por el gobierno argentino, que de todas formas se vería beneficiado en medio de la transición presidencial y de la renegociación del acuerdo que se plantea discutir con la administración de Milei. En este sentido, se debe tener en cuenta que durante diciembre, el país tendrá que enfrentar un vencimiento de US$900 millones con el organismo.
Actualmente, la sobretasa que encarece los créditos de la Argentina representa unos US$1500 millones adicionales por año. Los sobrecargos se aplican cuando el saldo deudor supera el límite equivalente a 187,5% de la cuota del país en el FMI, que es el aporte de cada miembro al organismo. Inicialmente, es de 200 puntos y aplica sobre el saldo deudor que excede dicho límite.
En caso de que el saldo se mantenga por encima del límite durante un cierto período de tiempo (entre más de 36 meses y más de 51 meses para los EFF, acuerdos de facilidades extendidas), el sobrecargo se incrementa otros 100 puntos hasta 300 puntos
Durante este año, la tasa de interés que aplica para los sobrecargos se duplicó a raíz de que la Reserva Federal fue subiendo las tasas de interés que incidieron en las que cobra el FMI y que se asigna según la participación que tienen las monedas de los principales socios del organismo en la cotización del DEG (Derechos Especiales de Giro), la moneda en la que el FMI realiza sus transacciones.