El ministro de Economía, Luis Caputo, durante una entrevista con LN+, el cierre del Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (Enohsa), calificándolo como «un antro de corrupción» sin proporcionar denuncias concretas, una descripción muy similar a la que hizo el vocero Manuel Adorni cuando anunció la reestructuración de la Casa de Moneda.
Luis Caputo anunció que el Gobierno cerrará el Enohsa, calificándolo de «antro de corrupción», lo que pone en riesgo obras públicas y 230 puestos de trabajo
Este anuncio provocó la reacción inmediata de los trabajadores del Sindicato de Obras Sanitarias, que rechazaron enérgicamente la medida y se manifestaron frente a la sede del organismo en Corrientes al 1750, advirtiendo sobre las graves consecuencias para el acceso a cloacas y agua potable en el país, así como la pérdida de 230 puestos de trabajo calificados.
Caputo justificó el cierre del Enohsa señalando que fue creado «para hacer una o dos obras» y que luego «se convirtió en una caja de la política». El ministro argumentó que el organismo centraliza demasiadas obras, lo que dificulta su auditoría, y aseguró que la Subsecretaría de Servicios Hídricos asumirá sus funciones. Sin embargo, las declaraciones de Caputo contienen imprecisiones: el Enohsa tiene una historia de más de 60 años, habiendo sido creado en 1963 bajo el nombre de Servicio Nacional de Agua y Saneamiento.
En respuesta, el Sindicato Gran Buenos Aires de Trabajadores de Obras Sanitarias emitió un comunicado defendiendo al organismo, destacando que el Enohsa «gestiona y financia proyectos clave para el acceso al agua potable y cloacas en todo el país, especialmente en regiones vulnerables». También remarcaron que brinda asistencia técnica a los gobiernos locales, garantizando la calidad y sostenibilidad de los proyectos
Enohsa continúa con 116 obras prioritarias, mientras que la Subsecretaría de Servicios Hídricos solo gestiona cuatro. Entre las principales obras a cargo de Enohsa se encuentran proyectos del Programa Federal de Saneamiento (Profesa), obras de la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar), y otras financiadas por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID)
El sindicato también denunció que, a pesar de que el organismo cuenta con 230 empleados altamente calificados, el Gobierno ya ha reducido un 35% de su personal desde diciembre, cuando la plantilla era de 358 trabajadores. En contraste, la Subsecretaría de Servicios Hídricos, que Caputo propone como reemplazo, cuenta con solo 124 empleados, lo que pone en duda su capacidad para asumir las funciones del Enohsa.